Me acomodo a su lado pensando en como explicárselo.
-Hace años los dioses nos mandaron una profecía. Un mal muy poderoso estaba a punto de cernirse sobre todos nosotros, y sólo un humano podría derrotarle. Pero no un humano cualquiera, uno que cumpliera una serie de requisitos, que como adivinarás,el montaraz cumple.-me muerdo el labio no demasiado segura de hasta donde contarle.-Pero aún no sabemos de qué mal habla, de hecho, ni siquiera sabemos tanto como creemos o queremos; no hemos terminado de descifrarla. Los magos más poderosos lo llevan intentando años, pero no han logrado nada más. Sólo que la gran victoria llevará consigo una gran traición.
Terminado mi relato, miro al elfo con una sonrisa cansada, ajenos a que en otra de las cabañas, ya se preparaban para partir.
-Hace años los dioses nos mandaron una profecía. Un mal muy poderoso estaba a punto de cernirse sobre todos nosotros, y sólo un humano podría derrotarle. Pero no un humano cualquiera, uno que cumpliera una serie de requisitos, que como adivinarás,el montaraz cumple.-me muerdo el labio no demasiado segura de hasta donde contarle.-Pero aún no sabemos de qué mal habla, de hecho, ni siquiera sabemos tanto como creemos o queremos; no hemos terminado de descifrarla. Los magos más poderosos lo llevan intentando años, pero no han logrado nada más. Sólo que la gran victoria llevará consigo una gran traición.
Terminado mi relato, miro al elfo con una sonrisa cansada, ajenos a que en otra de las cabañas, ya se preparaban para partir.